|ETC.PE|: Los países ubicados en el Cinturón de Fuego del Pacífico, como nuestro país, enfrentan un riesgo constante de sismos de diversas magnitudes. Esta región destaca por su intensa actividad sísmica y volcánica, ya que las placas tectónicas en esta zona se encuentran en constante fricción y movimiento.
El origen de los sismos en el territorio peruano está directamente relacionado con la interacción entre la placa de Nazca y la placa Sudamericana. El doctor Hernando Tavera, presidente ejecutivo del IGP, explica que en las regiones centro y norte del Perú, la placa de Nazca se introduce desde la fosa Perú-Chile hasta una profundidad de 120 kilómetros debajo del borde costero.
Luego, se desplaza de manera casi horizontal bajo el continente hasta distancias aproximadas de 800 kilómetros. En la región sur, la placa de Nazca se introduce por debajo del continente de manera continua hasta alcanzar los 300 kilómetros de profundidad. Es debido a esto que esta región experimenta actividad volcánica.
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La interacción de ambas placas en el borde occidental de América del Sur ocurre por convergencia, lo que causa la continua deformación del territorio peruano y provoca sismos y erupciones volcánicas. El planeta Tierra sigue su evolución y el desarrollo de sus procesos también, por ello siempre ocurrirán eventos sísmicos de variada magnitud.
IGP clave para la vigilancia y difusión de información sobre la actividad sísmica en el país
En ese sentido, el IGP cuenta con el Centro Sismológico Nacional, clave para la vigilancia y difusión de información sobre la actividad sísmica en el país. Su misión principal es monitorear y analizar la actividad sísmica en todo el territorio peruano, cuenta con una red de estaciones sismológicas distribuidas estratégicamente a lo largo del país, estas estaciones están equipadas con sensores de última generación que registran las vibraciones del suelo en tiempo real. Los expertos sismólogos analizan la información recolectada que se transmite a una central.
Además, utiliza tecnología avanzada para el análisis y procesamiento de datos a fin de conocer la fuente sísmica y sus parámetros, tales como localización, magnitud y profundidad de los sismos. Esta capacidad de respuesta inmediata es esencial para alertar a la población y coordinar acciones de emergencia. Asimismo, es crucial entender que Perú es un país altamente sísmico, ya sea en la costa, sierra o selva. Por ello, es fundamental desarrollar una cultura de prevención sísmica que permita a los ciudadanos conocer su territorio, identificar peligros y actuar con responsabilidad.
De esta manera, el IGP continúa difundiendo el conocimiento científico y fomentando una cultura de prevención sísmica. Su compromiso se refleja en su lema: «Ciencia para protegernos, ciencia para avanzar».
